Romina Videla (37), atacada el fin de semana pasado cuando su pareja prendió fuego la casa que compartían, murió este jueves en el hospital de Melchor Romero. Es otro
target=”_blank”>femicidio en la cuarentena por el coronavirus y sería el décimo caso desde que comenzó la medida restrictiva, según registros de organizaciones no gubernamentales y organismos oficiales.
La familia de Videla y la Justicia confirmaron que la mujer falleció por las “severas lesiones recibidas en el incendio”. De acuerdo con los informes médicos terminó con casi el 80% de su cuerpo afectado por quemaduras. Eso provocó severas complicaciones respiratorias, renales y cardiológicas. Estuvo desde su internación en terapia intensiva, con respirador artificial y en coma inducido.
Ahora, el proceso que lleva adelante la fiscal María Eugenia Di Lorenzo, es por “homicidio agravado por violencia de género”. El acusado es Héctor Carrizo, jubilado del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), quien según testimonios reunidos en el expediente habría amenazado a Videla: “Voy a quemar la casa para que te mueras”.
Esa advertencia ocurrió el viernes a la noche, en medio de una violenta discusión. A la 1.30 del sábado, en 519 entre 184 y 185, de Melchor Romero, un llamado al 911 alertó sobre el fuego en la construcción. A los pocos minutos, Romina estaba con severas heridas, en la vereda. Carrizo habría iniciado las llamas y después le impidió salir.
Amigos de la mujer hicieron la denuncia y ese día, al atardecer, la policía detuvo a Carrizo. Estaba en las ruinas de la vivienda “tomando bebidas” con unos amigos. Ahora está alojado en una alcaidía de Tribunales. Estuvo frente a la fiscal y se negó a declarar en la indagatoria.
Cuando ocurrió el ataque, el agresor se llevó a una de las hijas de la pareja, de dos años. La otra nena que tienen estaba con los padres de Romina, a pocos metros del lugar.
En diálogo con Clarín, Franco Videla, hermano de la víctima, admitió que “Carrizo la maltrataba y mi hermana había hecho varias denuncias”. Convivían desde hacía cuatro años.
La vivienda era del ex penitenciario. Romina Videla tenía cinco hijas más con otro hombre que también vive en el barrio y del que estaba separada. Era ama de casa y “a veces hacía tareas de limpieza en casas particulares”, contó a este diario Daniela, una amiga de la mujer.
Según las entidades que trabajan en los temas de violencia en el hogar, el aislamiento obligatorio impuesto para afrontar la pandemia de coronavirus, aumentó el riesgo de ataques y casos de conflicto intrafamiliar. Desde que comenzó la cuarentena el número de denuncias al 144 aumentó un 60%, según informó el ministerio de la Mujer y Géneros de la Provincia.
En los últimos diez años en Argentina hay un promedio de un femicidio cada 30 horas. Según estadísticas de la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema, sólo en 2018 fueron 278. La mayoría de los asesinatos ocurren en las casas de las víctimas y son cometidos por parejas o ex.
Dónde llamar
Atención para mujeres en situación de violencia.
Atención a Víctimas de Violencia Familiar.
La Plata. Corresponsal.
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