Entre las muchas paradojas que está dejando a su paso la crisis sanitaria del Covid-19, el Clúster Audiovisual de Cataluña ha querido denunciar una de las más evidentes. Esto es: que mientras
que buena parte de las empresas del sector han visto su actividad frenada en seco, la demanda de contenidos a través de plataformas o de medios tradicionales como la radio y la televisión se ha disparado. De ahí que la entidad que agrupa las principales empresas de la industria audiovisual catalana haya reclamado a las administraciones públicas «medidas inminentes, universales y ágiles» que ayuden paliar la situación que sufren y sufrirán todas las empresas de la industria. Y es que, según una encuesta hecha pública este miércoles, 7 de cada 10 empresas del sector han reducido de forma parcial o puntual su actividad mientras que un 25% declara el cierre total de la actividad. En este contexto, el 72% de las empresas prevé tener problemas de liquidez y tesorería, mientras que el el 32% de los socios calcula que la crisis disminiuirà su facturación anual entre un 50 y un 75%. Cerca del 19% de las empresas sufrirán un impacto económico superior al 75% de la facturación. El sector, recuerdan desde el clúster, está integrado por 2.403 empresas y genera un volumen de negocio de 2.616,5 millones de euros. En este sentido, más del 44% de los encuestados calculan que tardarán entre 3 y 6 meses en poder trabajar en las mismas condiciones en que lo estaban haciendo antes del confinamiento, y casi un 28% espera que la etapa de recuperación se alargue más allá de los 6 meses. Según alerta el Clúster Audiovisual de Cataluña en un comunicado, la fuerte caída en la organización de eventos, festivales y ferias, el cierre de equipamientos culturales y de entretenimiento, la imposibilidad práctica de hacer rodajes audiovisuales, y la reducción de actividad de empresas y marcas afecta a prácticamente toda la cadena de valor del sector audiovisual. Es por eso que el presidente de la entidad, Miquel Rutllant, asegura que si no se actúa con agilidad, «las consecuencias pueden ser devastadoras para un sector estratégico para Cataluña».
FUENTE DIARIO ABC: