Ronaldinho fue trasladado a un hotel céntrico de Asunción este martes por la noche, luego de haber permanecido detenido durante 32 días en una dependencia policial. El juez
a cargo de la causa, Gustavo Amarilla, aceptó el pago de la fianza y, tras la comunicación por videollamada, el ex jugador y su hermano fueron conducidos a un alojamiento en la capital de Paraguay, obviamente custodiados, para cumplir la prisión domiciliaria.
Antes de subirse a un patrullero, Dinho apareció frente a una importante cantidad de cámaras y periodistas presentes en el sitio inicial del traslado. “Gracias a todos por sus oraciones”, fue lo único que dijo el brasileño, campeón del mundo con su país en 2002.
Además, le cumplió el sueño a un fanático que esperaba en la puerta del lugar. Este se acercó y Dinho le firmó la camiseta de Gremio, club donde jugó, delante de todos. Pura sonrisa para el hincha en cuestión.
Ronaldinho ante las cámaras y periodistas. (AFP).
La Justicia de Paraguay apresó a Ronaldinho y a su hermano por haber ingresado al país con pasaportes falsos. Ahora, deberán permanecer en un hotel mientras continúe el proceso correspondiente.
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Clarín
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