Diarrea en terneros: claves de manejo para evitar fuertes pérdidas

La diarrea es un problema importante en los rodeos ganaderos y puede provocar fuertes pérdidas. Las medidas de prevención son claves porque tratar a los animales es costoso y la recuperación

toma tiempo y puede generar un retraso potencial en la producción. La diarrea puede ocurrir a cualquier edad y por diversas causas, y es muy frecuente en terneros.

Los terneros no saludables requieren gastos adicionales en medicamentos y cualquier problema en los terneros representa dinero perdido.

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La Dra. Shelby Roberts explica que tanto los humanos como los animales tienen miles de millones de bacterias en el tracto gastrointestinal; algunas son buenas y otras son malas. “Estas bacterias mantienen un balance en un animal sano, pero cuando se quiebra y las malas bacterias invaden las buenas es cuando vemos los problemas”, advirtió.

Para Roberts hay cuatro medidas que son fundamentales para evitar pérdidas con las diarreas:

1. Detección precoz: La detección temprana de diarrea es esencial para restaurar los líquidos y electrolitos a fin de corregir la deshidratación lo antes posible. Algunos síntomas comunes asociados con diarrea incluyen la depresión, el reflejo débil de succión, la deshidratación (ojos hundidos) y la respiración anormal.

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2. Cuidar al rodeo para minimizar el riesgo: hay que manejar las vacas para minimizar la exposición de patógenos y el estrés en los terneros. Es clave mantener las áreas de parto lo más limpias posible para reducir la exposición de los patógenos en los terneros. Si es posible, aislar a los terneros enfermos y a sus madres del rebaño de vacas para evitar la propagación del patógeno.

3. Gestionar los requerimientos de nutrientes para las vacas madre: es central asegurarse de cumplir los requerimientos nutricionales de las madres. La calidad y la cantidad de calostro pueden verse negativamente afectadas por una inadecuada alimentación de la madre. Hay que recordar que las vacas que dan a luz durante el otoño amamantarán durante todo el invierno, por lo que tendrán mayores requerimientos nutricionales en comparación con las que paren en la primavera.

4. Utilizar la guía de puntuación fecal: el productor debe verificar su puntaje fecal. Si tiene una puntuación fecal menor a 2,5 durante más de cinco días, sus terneros tienen un problema.

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