El confinamiento supuso que la empresa de Francisco Quero redujese su actividad un 80 por ciento, pero la inacción no frenó el ingenio de su equipo. Dedicados al tratamiento de residuos de
obras y construcciones desde 2007, en Tryob idearon una manera de adaptar uno de sus nueve camiones para hacer las funciones de desinfección en las calles y espacios públicos donde fuera necesario. «Al ver por la televisión a los vehículos de la Unidad Militar de Emergencias, lo pensamos. No queríamos quedarnos de brazos cruzados. Nos sentíamos poco útiles y con impotencia por no poder hacer nada y queríamos ayudar de alguna manera», cuenta Quero, el gerente de la compañía madrileña. Gracias a su inventiva, ahora fumigan en la capital y en cinco municipios más de la región. El equipo, formado por 18 empleados, se implicó desde el primer momento en resolver el reto. «Toda la instalación del camión la hicimos muy rápido. Enseguida encontramos una bomba, los depósitos de agua, hicimos las pruebas y logramos que el invento funcionara», relata Quero, que destaca que «todo el personal se volcó». «Esta situación nos ha abierto los ojos y nos ha hecho ser más conscientes de que tenemos un buen equipo», subraya el responsable. Una vez logrado que todo casara, el pasado 26 de marzo se pusieron en contacto con varios ayuntamientos de la Comunidad para ofrecer de forma altruista sus servicios. Desde entonces, hacen turnos de tres horas en las localidades de Alcobendas, El Molar, Rivas Vaciamadrid, Pedrezuela y El Vellón. En cada lugar al que van a trabajar les proporcionan las tres cargas de mil litros de hipoclorito suficientes para llenar el depósito y que aguante durante toda la intervención. La propia UME fue quien les hizo llegar la tabla de mezclas que aplican, la receta para mantener a raya el coronavirus. Durante aquellas primeras semanas también dedicaron el mismo tiempo de manera altruista al Consistorio de la capital. Sin embargo, el pasado 16 de abril el Ayuntamiento de Madrid quiso compensar sus labores y les contrató para que repasasen las principales vías de la ciudad durante toda la noche. Gracias a ese convenio suscrito de urgencia, por el que se les dará 11.700 euros, la empresa ha contratado a otro conductor para que cubra el horario nocturno del camión y el otro trabajador pueda seguir ayudando de forma desinteresada al resto de poblaciones con las que se comprometieron. «La empresa destina de manera altruista el vehículo y el camión, pero al conductor le pagamos, no queremos que esta situación les perjudique, se han volcado», sostiene el gerente. «Los trabajos, que comenzaron el pasado 6 de abril, se desarrollan de 23 a 6 horas, de lunes a domingo y, aunque están contratados por tres semanas, son prorrogables más allá del plazo establecido y hasta que la situación vuelva a la normalidad», indicaron desde el Consistorio de la capital tras la aprobación en la Junta de Gobierno del contrato. Además, la concejalía que dirige el edil del PP Borja Carabante está probando el funcionamiento de un equipo similar, que pertenece a la empresa dMol. En este momento, presta servicio los miércoles, jueves y viernes desde las once de la noche a las seis de la mañana, también sin coste para el Ayuntamiento. Si el comportamiento de este equipo resulta adecuado, se planteará su contratación, como se ha hecho con Tryob. A pesar del buen servicio ya prestado, en Tryob continúan fluyendo ideas. «Un proveedor nos ha ofrecido un sistema nebulizador distinto y estamos viendo a ver si podemos usar un atomizador que también nebuliza agua para acoplarlo a otro vehículo que tenemos», anuncia Quero. Su objetivo es poder hacer dobles turnos y, así, borrar el rastro del Covid-19 y colmar Madrid de solidaridad.
FUENTE DIARIO ABC: