La Guardia Civil investiga a un joven de 21 años vecino de Alberca (Murcia) por haber abandonado un criadero clandestino de perros que tenía en Nerpio (Albacete), en el que fueron hallados
cuatro animales muertos y otros cuatro en estado grave, de los que uno murió posteriormente. Se le acusa de ser el presunto autor de un delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos. Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Elche de la Sierra, así como un veterinario de la Junta de Castilla-La Mancha, corroboraron las pésimas condiciones higiénico-sanitarias en las que estaban los perros, confinados en varias jaulas. Los cuatro que quedaban vivos presentaban debilidad por desnutrición y apenas podían levantarse, con parásitos, sin alimento y rodeados de sus propios excrementos. A continuación el Seprona, con la colaboración de la Policía Local de Murcia, localizó al dueño del terreno donde se encontraba los animales, que dijo que no había podido ir a atenderlos desde hacía varios días. Los agentes observaron siete remociones de terreno, al menos, dos de las cuales se hallaban destapadas por alimañas, dejando a la vista restos óseos de perros. Las diligencias policiales instruidas por los agentes del Seprona han sido entregadas en el juzgado de Instrucción número 2 de Hellín, mientras que los tres perros vivos, fueron decomisados y entregados en un centro de acogida de animales abandonados de la Diputación de Albacete.
FUENTE DIARIO ABC: