Llega el buen tiempo, se aproxima el verano… y el calendario suele estar plagado de fiestas. Eso sí, esta vez con el Covid-19 con asistente no invitado que puede modificar esas tradiciones
ancestrales. Algunas ya han pasado sin celebración como mandan los cánones, otras se han caído con antelación del calendario… y las que quedan por venir ¿qué pasará? Pues nada cierto sobre si la verbena sonará en la plaza del pueblo, se abrirán las peñas, habrá conciertos y competiciones. Es lo que tiene este desconocido virus y la «nueva normalidad» que trae consigo, «que no hay fechas», ha respondido este jueves el vicepresidente y portavoz de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, ante las dudas de esos alcaldes que no saben si podrán hacer cartel de fiestas. Lo que sí está claro, ha añadido Igea, es que «las verbenas ya no serán lo mismo durante una temporada» mientras no haya vacuna y se haya conseguido vencer a un virus que en menos de cinco meses ha puesto patas arriba al mundo entero. Así que sigue siendo clave mantener la distancia social y la higiene de manos y respiratoria como barrera para evitar los contagios por Covid-19, de modo que, ha señalado muy explícito Igea «no es una buena idea compartir el vaso de cachi» tan habitual en las verbenas y las fiestas. «Mi madre, castigada sin salir» Y lo que tendrá también que esperar una temporada son esos abrazos acumulados durante más de dos meses de abuelos a nietos. Por el momento, no es el momento, ha señalado también el vicepresidente de la Junta, médico de profesión y estricto defensor del distanciamiento social. «Lo hacemos pensando en que nuestras madres queremos que nos duren. Y nos duren mucho», ha señalado, antes de recordar que la suya, con 90 años, viente nietos y algún bisnieto ya también ansía poder achuchar a la familia, pero tendrá que aguardar. Su propio hijo, ahora vicepresidente de la Junta y médico, no cede. «Me riñe”, ha confesado Igea sobre su progenitora, pues «es la primera vez que castigo a mi madre sin salir».
FUENTE DIARIO ABC: