Castilla y León ha solicitado este miércoles al Gobierno que la Comunidad pueda avanzar a la fase 3 de desescalada el próximo lunes, 15 de junio, debido a la evolución de la
situación epidemiológica. Esto implicaría que la Comunidad Autónoma sólo tendría que permanecer en fase 2 una semana, frente a los 14 días precedentes. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha presidido una nueva ronda de reuniones bilaterales entre el Gobierno y las autonomías (Castilla y León, Valencia, Castilla-La Mancha y Ceuta) para avanzar en el plan de transición hacia una nueva normalidad, en la que la Comunidad, como ya explicó el martes la consejera de Sanidad, Verónica Casado, pidió el progreso de fase. En un principio, la Junta se había mostrado partidaria de esperar catorce días para pasar de etapa, pero la situación epidemeológica es favorable y permite ya que la Comunidad acelere el ritmo hacia la normalidad. Y es que, incluso, el departamento dirigido por Salvador Illa ha animado a la región a dar el paso. Eso sí, la Junta mantiene la prudencia y estudiará limitaciones a las medidas que están permitidas en la fase 3. Así lo aseguró este martes Casado, quien explicó que será el comité autonómico de expertos el que decida si se dan esas restricciones que podría impidir la movilidad a algunas zonas o provincias. Sobre este aspecto, detalló que hay «situaciones diferentes en cada uno de los territorios». «Hay provincias que han tenido menos casos, están blindadas y bien, pero hay otras, como las más cercanas a Madrid, que tienen más», expresó.
FUENTE DIARIO ABC:
