Con el comienzo del verano, vuelven también a despertar en las costas catalanas las grandes vedettes del mar. El avance de la desescalada fue rápidamente aprovechado por las empresas organizadoras de cruceros,
que se han apurado a informar que están preparando sus barcos más lujosos para que pronto puedan retomar su agenda de recorridos. Este sector se encuentra entre los principales afectados por una pandemia que no sólo ha echado por tierra las previsiones que tenía para la primavera, sino que dejado estampas inéditas, con muchas de las embarcaciones varadas en el mar debido a la cuarentena. De esta manera, las ambiciosas predicciones del sector para este 2020, que se suponía sería todo un éxito en Barcelona (con más de 850 escalas de cruceros previstas en la ciudad durante este año) son ahora reemplazadas por un solo objetivo: retomar sus actividades. La vuelta al mar La mayoría de las empresas que operan en Barcelona se encuentran actualmente reprogramando sus viajes y sacarán su flota al mar a partir del mes de agosto. Para compensar la caída en ventas de la primera mitad del año, durante estos días comienzan a promocionar con entusiasmo recorridos invernales y a comercializar paquetes para el verano de 2021. Uno de los gigantes del sector que está en pleno período de reorganización de su flota es MSC Cruceros. Según ha informado la empresa, las salidas de sus barcos están canceladas hasta el próximo 31 de julio. Sin embargo, la compañía ha anunciado oficialmente esta semana el lanzamiento de su próxima temporada de cruceros. Entre las novedades que se implementarán en la navegación del Mediterráneo, la empresa ha dado a conocer que una de sus embarcaciones, MSC Virtuosa, será reemplazada por MSC Grandiosa (por un retraso en la entrega del barco debido a la pandemia) y, además, ya ofrece una serie de recorridos por Barcelona y otras ciudades para Navidad y Año Nuevo. Otra de las compañías que en estos momentos se encuentra preparando sus unidades para el gran regreso a los océanos es Virgin Voyages, que ofrece una ruta por el Mediterráneo en la que Barcelona es una parada clave. La empresa, que permite hacer reservas para embarcar a partir del próximo mes de octubre, ha elaborado un protocolo de seguridad para evitar el contagio de coronavirus durante los trayectos. Con este objetivo, implementará un sistema de purificación y desinfección del aire, brindará la opción de delivery de comida dentro de la embarcación para frenar la transmisión del virus en las enormes salas donde habitualmente se sirve la cena y, por supuesto, exigirá a sus pasajeros el uso de mascarillas al interior de sus cruceros. «Si a las personas se les recomienda utilizar mascarillas en tierra, también lo haremos en el mar», aclara la firma. Un poco antes, en el mes de septiembre, reanuda también sus actividades el imponente Silver Spirit. La embarcación pertenece la compañía Silver Sea y recorrerá el Mediterráneo apenas finalizado el verano, a partir del próximo 25 de septiembre. El puerto espera Por su parte, Barcelona también activa sus preparativos para los próximos meses. Su puerto, que es uno de los tres principales en todo el territorio nacional -con una facturación que el año pasado superó los 172 millones de euros-, ha invertido recientemente en la tecnología de T-Systems para ganar eficiencia y optimizar el uso de las embarcaciones. A su vez, a comienzos de este mes el Govern dio aprobación a un protocolo que impulsará el desarrollo y la planificación del Puerto de Barcelona. Todas estas iniciativas apuntan en la misma dirección: la necesidad de reactivar y potenciar el enclave marítimo de la ciudad, que tanto ha perdido en los últimos meses debido a la pandemia.
FUENTE DIARIO ABC: