Algo más de 103.000 alumnos de algunos cursos de Educación Infantil, Especial y Primaria volvían esta mañana al colegio en Galicia tras seis meses sin pisar los centros educativos por culpa del
coronavirus. La vuelta a las aulas se inicia con una huelga del profesorado apoyada por los padres que consideran que las medidas previstas para evitar los contagios no son suficientes. Siguen reclamando que la distancia de seguridad de 1,5 metros entre alumnos se aplique a todas las etapas educativas. Los escolares que esta mañana regresaban a las aulas de forma escalonada -este viernes se sumarán otros 90.000 alumnos- convivirán en lo que se denomina grupos burbuja de 25 alumnos. Los sindicatos, que esta ñanana se concentraron, en las principales ciudades gallegas, tacharon esta medida de «engaño». «Esas aulas burbuja se rompen en el el momento en el que el alumno sale por la puerta del cole tras cinco horas de clase. Acabó, porque va para casa a convivir con otros niños, hermanos, va al parque…», censuró la respondable de Ensino de CCOO, Luz López, en la concentración de protesta ante las medidas para hacer frente al Covid celebrada esta mañana en Santiago. Para Suso Bermello, de la CIG, la decisión tomada a finales de agosto de instaurar las medidas de distancia de 1,5 metros para las etapas de Secundaria y Bachillerato, supone una discriminación para el alumnado de menor edad. «¿Alguien puede pensar que una aula de quinto de primaria o quinto de infantil tiene menos derechos que una aula de Bachellerato y FP?. Es absolutamente impresentable lo que hizo la Consellería», reflexionó. Según Bermello, la ratio ideal para prevenir los contagios es de máximo 20 alumnos por clase. «Hay comunidades autonómas como Valencia que implantaron en todas las etapas educativas ese máximo. ¿Qué tenemos los gallegos para tener que sufrir unas condciones inferiores?, denunció. Los sindicatos protestaron también por los servicios mínimos impuestos por la Consellería de Educación de cara a la huelga, que vienen de ser ratificados por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. Consideran que se les arrebata su derecho a la protesta. Los presentes en la concentración no disponían de datos de seguimiento, pero en un comunicado el sindicato STEG asegura que está siendo alto. Si esta semana regresa la educación presencial para los más pequeños, la próxima lo hará para el resto de las etapas no universitarias. Estos centros sí que tendrán que adaptar sus espacios para poder separar a los alumnos. Los sindicatos denuncian precipitación, dado que hasta finales de agosto no se rectificó el primer protocolo impulsado con la Xunta, en el que no se contemplaba desdoblar aulas en caso de que no pudiese mantenerse la distancia de seguridad. Según STEG, en Santiago varios equipos directivos de Secundaria se han dirigido por escrito á Consellería anunciando que retrasan el inicio del curso, pues «es materialmente imposible organizar de nuevo el inicio de la actividad en los términos actualmente vigentes, que non se conocieron hasta hace unos días». Luz López, de CCOO, pronosticó que habrá más centros a los que no les dé tiempo. «Las primeras medidas salieron en julio, los centros educativos estuvieron trabajando en implementar esas medidas. Cuando tenían prácticamente todo medido, el 31 de agosto sacan unas nuevas medidas y desdobles si no se podían implementar. Todo el trabajo que se hizo en julio no valió para nada, hay que volver a empezar», censuró. «En los institutos de las ciudades es muy complicado articular todas estas medidas para empezar el día 16», subrayó.
FUENTE DIARIO ABC: