Adama Traoré fue uno de los grandes protagonistas del Portugal-España en Lisboa. Salió a falta de media hora, y fue más que suficiente para que el aficionado español comprobará las mejores cualidades
de este futbolista-atleta, cuyo físico llama poderosamente la atención. El día después del encuentro en el Jose Alvalade, Adama fue también actor principal en la rueda de prensa de la concentración de la selección española en Las Rozas. El catalán de origen maliense aseguró que no hace pesas, porque bastante volumen dice ganar ya con su trabajo diario. «Hago trabajo fuera del terreno de juego para mejorar físicamente y evitar lesiones, pero entre todo lo que hago no están las pesas. Con esa pinta de velocista, Adama explica entre risas que tiene ganas de probarse en los 100 metros, una de las pruebas reina del atletismo: Nunca lo he hecho y me gustaría. En los partidos el GPS ya me dice a la velocidad que voy en el campo. Me sorprende a veces, pero es mi juego. Utilizo esa cualidad para sacar provecho de ello«. Contento con su debut, demorado antes en dos ocasiones, una por lesión y otra por el coronavirus, Adama Traoré agradece la confianza de Luis Enrique, que le considera el jugador con más desborde de Europa: «Para pararle se necesitan entre dos y tres rivales», llegó a decir el técnico asturiano. «Con Luis solo tengo agradecimiento por confiar en mí», cuenta Adama. «Es bueno que pueda tener a tres rivales pendientes de mí, porque eso querrá decir que hay compañeros míos libres de marca. Hay que intentar sacar provecho de eso». Su futuro, de momento, está en el Wolverhampton, aunque los grandes de Europa le siguen muy de cerca. Horas después del cierre del mercado se desveló que la Juventus había intentado llevárselo en este cierre de mercado. «Si soy el mismo de ayer para mí es un día perdido», dice Adama para explicar la máxima de su vida. «Venía trabajando desde hace muchísimo para vivir este momento».
Fuente La Razon:
