Las reservas de Paso Severino ya alcanzaron el 12,7% y todas las líneas de bombeo de la zona metropolitana registraron valores de cloruro y sodio por debajo de los 100 mg/l.
La crisis del agua todavía no terminó, pero los niveles de salinidad en el suministro de la Administración Nacional de Obras Sanitarias del Estado (OSE) a la zona metropolitana de Uruguay son cada vez más bajos gracias al aumento de caudal en la cuenca Santa Lucía. ¿Hasta cuánto puede durar la mejora de la situación hídrica?
Las reservas de Paso Severino siguen creciendo mientras gran parte del país todavía aguarda expectante las lluvias que puedan poner un punto final a la emergencia hídrica en la zona metropolitana: según el informe de Presidencia, el embalse alcanzó los 8.513.526 metros cúbicos, un 12,7% de su caudal normal.
Mientras tanto, y con un consumo en Montevideo y las zonas aledañas que se mantiene relativamente estable en torno a los 500.000 metros cúbicos diarios, la calidad del agua que llega a las canillas de los hogares continúa mejorando, con las tres líneas de bombeo con valores de cloruro y sodio registrados por debajo de los 100 miligramos por litro.
De esta forma, según el informe oficial, en la línea de bombeo 4 que abastece al centro de la capital del país, la medición del promedio diario de cloruros alcanzó los 78 mg/l y los 81 mg/l de sodio. En la línea de bombeo 5 que suministra agua a la zona oeste de Montevideo y alrededores, los cloruros llegaron a 79 mg/l y el sodio a 81 mg/l. A su vez, en la línea de bombeo 6 que abastece al este de la capital y sus alrededores los registros diarios de cloruros fueron de 69 mg/l y los de sodio de 75 mg/l.
Estos valores ya son los mínimos desde el 19 de junio, cuando se decretó la emergencia hídrica.
¿Qué opinan los expertos?
Según el director del Instituto de Ecología y Ciencias Ambientales de la Universidad de la República (Udelar), Daniel Panario, los niveles de salinidad en el agua se están “normalizando” dentro de los parámetros permitidos a nivel mundial, por lo que nuevamente es seguro beberla para toda la población —si bien desde el gobierno siguen recomendando el consumo de agua embotellada para poblaciones vulnerables en cuestiones de salud. Si bien es difícil estimar por cuánto tiempo puede extenderse esta “tregua” en la crisis hídrica, el especialista señaló que la cuenca del río Santa Lucía “tiene buen caudal” para que la salinidad se mantenga baja por “algunos días más”, señaló al diario El País.
El optimismo llega también a OSE, que ya no toma agua de Paso Severino para abastecer a la población, en tanto casi la totalidad del suministro para la zona metropolitana proviene del Santa Lucía Grande gracias a las lluvias que aumentaron el caudal lo suficiente como para abastecer la planta potabilizadora de Aguas Corrientes.
Fuente Ambito