
El Banco Central del Uruguay (BCU) y el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) colocarán títulos de deuda pública doméstica esta semana por un total de 14.475 millones de pesos con plazos de hasta 364 días, junto con la Nota del Tesoro, en Unidades Indexadas (UI) Serie 29.
Este lunes, a las 14 horas, se licitará el primer título en pesos por 5000 millones de pesos – 125,73 millones de dólares, a valor de hoy–, con integración ese mismo día y con un plazo a 28 días. De ese total, 1000 millones de pesos serán colocaciones no competitivas.
El martes, a las 14:30 horas, se adjudicará la Nota del Tesoro Serie 29 por 275 Unidades Indexadas – 41,49 millones de dólares, a valor de hoy – con un plazo de 10,9 años, y un vencimiento fechado para el 24 de agosto de 2034. Esta licitación no tendrá colocaciones no competitivas y se adjudicará al día siguiente.
El miércoles habrá otra adjudicación, también a las 14 horas: se licitará un título por 5000 millones de pesos, equivalente a unos 125,73 millones de dólares, con integración el ese mismo día y con un plazo de 91 días. De este total, 1000 millones de pesos se consideran no competitivos.
El jueves, por su parte, se licitará el tercer título, con adjudicación al día siguiente, y por un valor de 4200 millones de pesos – unos 105,61 millones de dólares – y con un plazo de 364 días. De ese monto total, 840 millones de pesos se consideran no competitivos.
La deuda pública creció en el primer semestre
La deuda pública creció en el primer semestre con relación al PIB, según un informe de la Universidad Católica del Uruguay (UCU). De acuerdo al relevamiento de la UCU, tanto la deuda bruta como la neta (activos) crecieron si se compara con diciembre. La bruta alcanzó el 68,5% del PIB en junio, frente a 67,2% de fin de año, mientras que la deuda sin los activos del sector público se ubicó en 49,8% del PIB, contra el 48,2% de diciembre de 2022.
El relevamiento precisó que “tras alcanzar mínimos en 2013, la deuda subió de manera continua como proporción del PIB hasta 2019”, algo que atribuyó a “razones fiscales”, mientras precisó que esa situación se profundizó “especialmente en 2020 debido al impacto de la crisis sanitaria sobre las finanzas públicas y la actividad económica”.
La UCU destacó que en 2021 se produjo una reducción de la deuda pública con relación al PIB y en 2022 volvió a subir. No obstante, de cara al futuro, anticipó que “el deterioro registrado en la primera mitad del año se corregiría en el segundo semestre”. De esta manera, la deuda neta total del Estado volvería a cerca del 48% del PIB.
Fuente Ambito