La Sala I rechazó los recursos extraordinarios de la fiscalía para que las absoluciones de Cristóbal López y Fabián De Sousa sean apeladas ante la Corte Suprema. Consideró válida su decisión de octubre pasado en la que dejó firme el fallo del Tribunal Oral.
Con las firmas de Diego Barroetaveña y Daniel Petrone, la Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal rechazó de plano el intento de la fiscalía de ir a discutir a la Corte Suprema su decisión del 23 de octubre pasado, en la que dejó firme el fallo que absolvió a los accionistas del Grupo Indalo Cristóbal López y Fabián De Sousa por el caso Oil Combustibles.
De manera categórica, los jueces afirmaron que ninguno de los planteos que pedían una nueva revisión eran admisibles. En ambos votos coincidentes, los camaristas sostuvieron que no se traía a debate una cuestión federal, ni tampoco correspondía hacer lugar porque no se demostraron defectos que invalidaran la decisión impugnada.
“La parte recurrente basó su impugnación en la reedición de agravios que tuvieron adecuada respuesta y en juicios discrepantes con el criterio adoptado, lo que no implica de suyo acreditar relación directa entre la materia del pleito y la cuestión federal invocada”, sentenciaron en un escrito de pocas carillas Barroetaveña y Petrone. “Finalmente, tampoco se advierte ni se ha demostrado que se configure en el caso un supuesto de gravedad institucional para habilitar la jurisdicción de la Corte Suprema”, subrayaron.
De esta forma, Casación cierra el camino para la pretensión del Ministerio Público Fiscal que insistía en cuestionar lo decidido por los jueces del Tribunal Oral Federal N°3, luego de más de dos años de juicio. La única vía que le queda a la fiscalía es acudir “en queja”, pero en una posición debilitada ante los sucesivos rechazos en todas las instancias anteriores.
La Sala I consideró que habían analizado todos los planteos de los fiscales en su extenso fallo de hace casi dos meses, luego del veredicto absolutorio pronunciado el 16 de diciembre de 2021. El caso había sido uno de los más relevantes por su impacto político, económico y mediático luego de que se acusara a los empresarios y a la petrolera de haber montado una defraudación al Estado a través de la adhesión de planes de pago a la AFIP por su deuda por el Impuesto a la Transferencia de Combustibles.
Luego de un juicio que se extendió por más de dos años y donde desfilaron medio centenar de testigos, hubo un peritaje oficial de la Corte que desacreditaba la acusación y hasta se inició una investigación penal por la manipulación de la prueba con la que se inició el caso, el TOF, por mayoría decidió absolver a López y De Sousa y condenar al extitular de la AFIP Ricardo Echegaray porque consideró que debió haber establecido normas para el otorgamiento de los planes bajo el criterio del Artículo 32.
Ni los accionistas de Oil, ni la empresa cometieron delito alguno al peticionar los planes, cuyo cumplimiento quedó corroborado. Pero también se desbarató parte dela estrategia de la acusación que sostenía que se apropiaron de fondos de terceros –los consumidores de combustible– para financiar la expansión del holding empresario. En definitiva, marcó el punto final para el expediente que había sido presentado como un gigantesco fraude por $8 mil millones y mantuvo en prisión preventiva a López y De Sousa por 22 meses. Dos años más tarde, Casación se pronunció en el mismo sentido, avalando la decisión mayoritaria del TOF, luego de dos jornadas en las que expusieron las partes y sepultó a la acusación.
Ahora, ratifica esa decisión por lo que el caso obtuvo su doble conforme definitivo.
Fuente Ambito