En la lista de pendientes para unas vacaciones seguras en las últimas décadas se ha sumado un ítem al protector solar, el pasaporte, el auto en condiciones y las llaves de casa. En la medida que tendemos cada vez más a depender de transferencias o pagos electrónicos y menos del papel moneda, la seguridad de nuestros dispositivos es clave en el momento del año en el que estamos más distraídos.
Fabio Sánchez, director de Ciberseguridad de OCP TECH, dio algunas recomendaciones sobre qué se debe tener en cuenta si buscamos reducir al máximo la posibilidad de sufrir un percance que nos amargue el verano.
“La primera tiene que ver con evitar conectarnos a una red pública de internet. Existen numerosos riesgos asociados con esta acción en apariencia muy normal. Por ejemplo, estas redes pueden estar infectadas con programas maliciosos que roban información personal, contraseñas o datos bancarios. En lugares con un turismo especialmente concentrado, la posibilidad de que esto suceda crece exponencialmente”, comentó Sánchez.
Para los que veranean en Argentina, el especialista aconsejó usar siempre los datos de nuestro plan de telefonía móvil, o en su defecto el de una tarjeta prepaga. En tanto, para los que viajan al exterior, si no queda otra opción que conectarse a redes públicas, lo mejor es usar siempre una red privada virtual (VPN) que cifre nuestra conexión y nos permita navegar de forma anónima y segura (en internet existen numerosos tutoriales que te pueden ayudar a configurar una VPN de forma sencilla), lo que reducirá considerablemente los riesgos.
Dado que el celular se convirtió en el acompañante por excelencia del viajero tanto para obtener información al instante como para consultar mapas o la frecuencia del transporte público, como para realizar pagos en moneda extranjera, no llevarlo no es una opción. “Es importante activar el bloqueo automático de pantalla y el borrado remoto en caso de pérdida o robo. Con esto no evitaremos el trago amargo, pero sí podremos evitar al menos que alguien acceda a la información del dispositivo sin nuestro consentimiento”, recomendó Sánchez.
Otra indicación que no por ser obvia es menos importante es nunca dejar los dispositivos desatendidos en lugares públicos. No sólo pueden robarlo sino también instalarle un software espía en cuestión de segundos. Por eso, es fundamental que llevemos el celular siempre con nosotros y lo dejemos fuera de la vista y el alcance de los demás.
No se recomienda la carga de dispositivos a través de puertos USB de uso público, como en un shopping o un aeropuerto. Estos puertos pueden estar manipulados para acceder a los datos y contenido de cualquier dispositivo que se conecte a ellos, e incluso infectarlo con malware. Una excelente manera de evitar este problema es invertir en un cargador portátil o, en su defecto, utilizar para la carga de dispositivos sólo el tomacorriente de la pared.
El último consejo es tener siempre a mano una versión digital de la documentación necesaria para nuestro viaje: tickets de vuelo, reservas de hotel, pasaportes, seguro médico, etc. “Además de ayudar al planeta, estamos evitando que los documentos en papel, que son en esencia descartables, caigan en manos equivocadas. Debemos tener siempre presente que los datos personales son la llave para el robo y suplantación de identidad, el acceso a cuentas bancarias o incluso el robo de puntos o millas de viaje”, resumió el especialista.
Fuente Ambito