La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) inició este martes su reunión de política monetaria, durante la cual discutirá el momento oportuno para comenzar a reducir sus tasas de interés. El mercado espera que haya indicios de un recorte para su próxima reunión, en setiembre.
La reunión del Comité de Política Monetaria (FOMC) terminará el miércoles con un comunicado a las 14:00 locales (15:00 hora uruguaya) y el presidente de la Fed, Jerome Powell, dará su habitual conferencia de prensa media hora después. Se espera que la Fed mantenga sus tasas en sus niveles actuales de 5,25-5,50%, los más altos desde 2001.
El banco central de Estados Unidos subió las tasas de interés como forma de encarecer el crédito y desalentar así el consumo y la inversión, y reducir así la inflación. El objetivo es una inflación de 2% anual, considerada sana para la economía. En junio, el índice PCE de inflación cayó a 2,5% en 12 meses.
La Fed “está a sólo 50 puntos básicos del objetivo… así que parece que no está muy lejos”, dijo Jim Bullard, expresidente de la Fed de San Luis y ahora decano de la Escuela de Negocios Mitchell E. Daniels Jr. de la Universidad Purdue, a Reuters. “¿Sigue siendo elevado? Claro, pero no tanto como antes”, agregó.
A pesar de las advertencias del año pasado de que unas condiciones financieras tan estrictas podrían desencadenar una recesión, la Reserva Federal, al menos por ahora, parece haber dado en el clavo. La inflación ha caído y, aunque la tasa de desempleo ha aumentado gradualmente, se mantiene en el 4,1%, en torno a lo que muchos dirigentes de la Fed consideran que representa el pleno empleo.
Pero el informe más reciente sobre la producción económica global fue sorprendentemente fuerte, con un crecimiento del 2,8% anualizado en el segundo trimestre. La Reserva Federal considera que el crecimiento potencial subyacente de la economía, compatible con una inflación estable, se sitúa en torno al 1,8%.
La Fed y una decisión de impacto en los mercados y la elección en EEUU
“Han tenido datos de inflación alentadores… Es evidente que la economía se está ralentizando. El balance de riesgos es diferente al de hace cuatro meses. Y punto”, dijo Nathan Sheets, economista jefe mundial de Citi. “Da la sensación de que quieren estar un poco más seguros, así que señal en julio y recorte en setiembre”.
Reconocer que la reducción de tipos es inminente pondría a la Fed en línea con los inversores que consideran casi seguro que aplicará al menos un recorte de un cuarto de punto porcentual en la reunión del 17-18 de setiembre, el primer paso para revertir la serie más rápida de subidas de tipos en cuatro décadas.
También la pondría en el punto de mira de una tumultuosa carrera presidencial en Estados Unidos. Puede que la inflación no sea tan protagonista en la campaña, ya que esta ha incluido un atentado contra el expresidente Donald Trump y la retirada del presidente Joe Biden. Pero los legisladores republicanos a principios de este mes le dijeron a Powell que un recorte de tipos en setiembre podría parecer un esfuerzo por inclinar el campo de juego contra Trump, quien lo instaló como presidente de la Fed a principios de 2018 solo para volverse profundamente crítico con su liderazgo del banco central.
El tema de la inflación, mientras tanto, todavía puede figurar en las elecciones. En su último modelo electoral, Oxford Economics afirma que la forma en que los votantes indecisos interpreten los próximos datos económicos podría decantarles hacia Trump, si siguen “fijándose en el nivel de precios y lo mucho que han subido”, o hacia Kamala Harris –reemplazo de Biden- si “se centran en las tendencias recientes de la inflación y el bajo nivel de desempleo”.
Fuente Ambito