Ecuador: por la sequía histórica habrá apagones programados desde las 22 horas

En medio de su peor sequía en los últimos 60 años, el Gobierno de Ecuador implementará fuertes medidas ante el riesgo de sus centrales hidroeléctricas: habrá apagones nocturnos de ocho horas a nivel nacional y los empleados estatales harán teletrabajo.

Las medidas apuntan a ahorrar energía ante “el peor estiaje de los últimos 61 años y con la finalidad de manejar de forma responsable el control de nuestro sistema eléctrico”, anunció la presidencia en un comunicado.

Al respecto, la administración de Daniel Noboa explicó que la sequía que afecta a los embalses de varias hidroeléctricas, principal fuente de suministro, los racionamientos de ocho horas se darán en todo el país desde las 22 horas locales entre el lunes 23 y jueves 26 de setiembre.

“El horario de corte establecido ha sido escogido con la finalidad de generar el menor impacto posible en las actividades productivas y el desarrollo de jornadas laborales“, señaló el Ejecutivo.

Apagones programados en Ecuador por sequía histórica

Con cada uno de los apagones, Ecuador perderá alrededor de 12 millones de dólares, según informó la Cámara de Comercio del puerto de Guayaquil, el centro neurálgico del comercio del país.

Otra de las medidas que tomará el Gobierno para reducir el consumo de energía será imponer el teletrabajo para el sector público el jueves y viernes de esta semana.

Además, el domingo pasado, el gobierno anticipó un apagón general de ocho horas desde las 22 horas de este miércoles debido a un “mantenimiento preventivo” en el sistema de transmisión de energía.

Durante ese período, habrá un toque de queda en las provincias de Guayas, Los Ríos, Manabí, Santa Elena, El Oro, Orellana y la localidad de Ponce Enríquez (Azuay), que están bajo estado de excepción desde el 30 de agosto por la violencia del narcotráfico.

Graves problemas energéticos en Ecuador

En abril, Ecuador ya había sufrido una situación similar a causa de la sequía y llegó a haber 13 horas sin luz. En ese momento, el sector eléctrico fue declarado en emergencia en abril por los bajos caudales en los ríos.

En junio, también hubo cortes luego de que las lluvias generaron la acumulación de sedimentos que pusieron en riesgo la represa de Mazar, en el sur andino y que abastece de agua a un complejo de tres centrales hidroeléctricas.

El 7 de septiembre, un “error humano” ocasionó un sorpresivo apagón en varias provincias.

Fuente Ambito

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