El ministro de Seguridad de Santa Fe, Marcelo Sain, reiteró que el narcomenudeo tiene una incidencia central al momento de explicar los crímenes ocurridos en Rosario y opinó que “no hay
ningún sector capitalista en esta ciudad que gane tanto dinero como el narcotráfico”.
“Hay un mercado prolífico de cocaína. Ese mercado, de altísima rentabilidad, es para los sectores medios y altos de esta ciudad. Hay gente que consume mucho. Por eso la disputa por los búnkeres y por los lugares de distribución son disputas comerciales millonarias. No hay ningún sector capitalista en esta ciudad que gane tanto dinero como el narcotráfico. ¿Está claro?”, planteó el funcionario.
En otra fuerte declaración, a principios de semana, Sain aseguró que “acá no hay más muertos porque Dios es santafesino”. Lo hizo al hablar del extendido mercado ilegal de armas.
Sain expuso el viernes en el Concejo municipal de Rosario sobre las reformas en las leyes de seguridad pública que impulsa el Gobierno santafesino, que incluyen cambios profundos en la policía y que deben ser tratados por la Legislatura provincial.
En ese marco, y en diálogo con la prensa, habló del millonario negocio narco y aclaró que “toda esa rentabilidad no queda en los barrios populares donde se matan los muchachos y las chicas”, y consideró que “el sistema penal está armado para meter presos a negritos de la periferia”.
En el Gran Rosario se registraron hasta el momento 89 crímenes en lo que va del año. La cuarentena decretada por el coronavirus logró frenar una estadística que en los primeros 80 días del año tuvo una fuerte escalada: 66 homicidios (el 74 %) se registraron en el primer trimestre. Sólo los mismos períodos de 2014 y 2015 superan esa cifra.
En 2013 ocurrió un alza en el número de asesinatos en medio de una cruenta disputa narco que sigue siendo récord en las estadísticas: 271, de acuerdo a relevamientos del ministerio de Seguridad y el Ministerio Público de la Acusación.
“No quiero caer en las comparaciones políticas estúpidas de que los muertos son de la gestión anterior o de esta gestión. Quiero discutir las razones porque esto ocurre”, dijo el viernes Sain.
Entre otros puntos marcó que al asumir encontró una policía “muy corta, muy deteriorada infraestructuralmente”. En ese punto detalló que “el 75 % de las unidades operacionales de base en toda la provincia, comisaría, subcomisarías y destacamentos de base, que son cerca de cuatrocientas y poco, tienen menos de veinte personas asignadas a la misma. Eso significa no son unidades operacionales. Así el sistema no funciona”.
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